Las etiquetas son fragmentos de código que normalmente se colocan en el <head> de una página que nos permiten el seguimiento, análisis y generación de informes de terceros. Google Analytics y otras plataformas de análisis son una marca obvia, pero el remarketing, los servicios de seguimiento de conversiones y los servicios avanzados de información de clientes también utilizan etiquetas.
La gestión de etiquetas, o tags en inglés, es un concepto que nació de la creciente necesidad de que incrementáramos la agilidad de la medición de la comercialización y la capacidad de seguimiento. Gestionar y hacer cambios en las etiquetas puede ser tedioso e implica mucho trabajo innecesario.
Imagina cómo sería en nuestra empresa sumar esa pila de trabajo a todo lo que ya llevamos a cabo. El envío de emails, programación de reuniones, o las carreras de última hora para evitar poner excusas al jefe, la actualización de los servidores cada tres semanas, una videoconferencia crucial que tiene que funcionar programada para el estreno mundial de nuestro producto para dentro de otras tres, y situaciones similares. En ese contexto, nacen las tags o etiquetas, para ahorrarnos bastante trabajo extra.
La propuesta de Google Tag Manager
1.- Acaba con la necesidad de editar el código del sitio web una y otra vez solo para añadir, eliminar o editar etiquetas.
En su lugar, se coloca un código en cada página del sitio web, que es el código del container de Google Tag Manager.
Este container actúa literalmente como un contenedor, ya que puede almacenar y desplegar varias etiquetas de marketing y análisis. No es necesario que codifiquemos el sitio web una y otra vez solo para aplicar y mantener varias etiquetas.
2.- Si sabes cómo funciona Google Tag Manager, puedes probar a crear etiquetas más rápido sin codificarlas cada vez en tu sitio web.
No puedes darte el lujo de pasar semanas o incluso meses, añadiendo un montón de etiquetas en tu sitio web, porque el equipo de TIC está demasiado ocupado actualizando los catálogos de productos.
Un problema común para la mayoría de nosotros es que la dependencia de los desarrolladores web para cualquier tarea relacionada con el código nos los hace muy lentos, cuando se trata de adoptar cualquier cosa ágilmente. Con Google Tag Manager instalado, podemos cambiar las etiquetas en mucho menos tiempo.
3.- Otra de las características de cómo funciona Google Tag Manager, es que hace posible un seguimiento avanzado para nuestro sitio web. Esto es porque proporciona muchas etiquetas y funciones a través de las cuales puedes hacer un seguimiento avanzado en muy poco tiempo. Hasta ahora, y los que lo hemos sufrido sabemos de qué hablamos, echábamos un montón de horas en esta tarea.
Por ejemplo, te sirve si quieres empezar a realizar un seguimiento de los clics en todos los enlaces externos de tu sitio web, para poder saber la cantidad de tráfico que el sitio está enviando a otros sitios web (anunciantes, afiliados), que nos va a ser tremendamente útil para monetizarlo.
Si estás utilizando el Google Tag Manager, puedes completar esta tarea en cuestión de minutos. Además, conseguiremos minimizar los errores humanos al no tardar tanto tiempo en picar el código necesario.
Del mismo modo, Google Tag Manager puede realizar un seguimiento de los links de redireccionamiento insertados en las páginas de nuestro sitio web en cuestión de minutos.
En definitiva, podemos concluir que conocer el uso y funcionamiento de Google Tag Manager nos ahorra muchísimo tiempo, y sin duda su manejo apunta a convertirse en un activo incalculable para los profesionales que centremos nuestra actividad profesional en dominarlo, porque va a tener una gran demanda.
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